Paro Internacional de Mujeres
FEMINISMO
OPINIÓN
Cristal de Roca
A la huelga

¿Qué pasaría si un día cualquiera las mujeres de su ciudad o de su estado o del país se pusieran en huelga?
Imaginemos ese día: Las mujeres se levantarán muy temprano, y simplemente se vestirán para salir a encontrarse con otras mujeres en la calle o la plaza pública, donde pasarán todo el día, platicando, cantando, reflexionando, debatiendo.
Nada de despertar a las niñas y niños para ir al colegio. Nada de dar biberón y cambiar pañales. Nada de preparar desayuno. Nada de hacer las compras, preparar la comida, limpiar la casa, cuidar al familiar que padece alguna enfermedad.
Nada de trabajar en el banco, supermercado, hospital u escuela. Nada de ir a la empresa, la fábrica o el campo. Nada de cumplir con labores gubernamentales, secretariales, docentes... ¿Puede imaginar qué pasaría?
En Islandia no se lo imaginaron. ¡Lo llevaron a cabo!
Un 24 de octubre de 1975, en esa isla que entonces tenía poco más de 200 mil habitantes, 90 por ciento de las mujeres se pusieron en huelga.
Las organizadoras buscaban visibilizar la enorme cantidad de trabajo que hacían las mujeres y las desiguales condiciones en las que lo hacían. Y convocaron a lo que llamaron “El Día libre de las Mujeres”, aunque pasó a la historia como “Viernes largo”, porque bancos, fábricas, escuelas, tiendas, guarderías, oficinas gubernamentales y un largo etcétera tuvieron que cerrar. Islandia se paralizó. Y todo cambió. Hoy es el país con más igualdad de mujeres y hombres.
Por eso, colectivos feministas de medio mundo convocaron por segunda vez a la huelga de mujeres el 8 de marzo.
La intención no es sólo hacer evidente todo el trabajo que hacemos las mujeres y las desiguales condiciones en que lo hacemos. Es exigir acciones claras y contundentes para que cesen las violencias en nuestra contra.
¿A quién le exigimos? Al Estado, claro, pero también a nuestros compañeros, colegas, amigos, hermanos, padres. La desigualdad, discriminación y violencias que vivimos tiene muchos cómplices por acción u omisión.
En nuestro país las mujeres trabajan diariamente en promedio cinco horas más que los hombres en tareas del hogar, y ganan 19 por ciento menos en el ámbito laboral remunerado.
En la toma de decisiones gracias a la obligatoriedad de paridad en cargos de elección popular, en promedio 40 por ciento de las curules de los Congresos estatales están ocupadas por mujeres. Pero sólo hay una gobernadora y menos del 14 por ciento en las presidencias municipales.
En otros ámbitos nuestra presencia es casi invisible. Apenas el mes pasado, por primera vez fue nombrada una Vicegobernadora en el Banco de México, ¡fundado en 1925!
Y si de violencia se trata los números son de pavor. En promedio, una de cada dos mexicanas vive violencia en su hogar; una mujer es violada cada cuatro minutos y siete son asesinadas diariamente.
¡Eso tiene que terminar! Porque no hay manera de construir un país en paz si la mitad de su población vive todos los días una guerra, de alta o baja intensidad.
¿Qué pasaría si 90 por ciento de las mujeres de nuestro país nos ponemos en huelga por un día?
Si la realidad no cambia, un soleado día lo sabremos.
*Periodista de Quintana Roo, feminista e integrante de la Red Internacional de periodistas con visión de género.
Apreciaría sus comentarios: cecilialavalle@hotmail.com
18/CL/LGL
FEMINISMO
Se organizan movilizaciones en 51 países
Alistan segundo Paro Internacional de Mujeres en marzo

Por segundo año consecutivo mujeres, trabajadoras, ciudadanas y feministas de todo el mundo se preparan para participar en el Paro Internacional de Mujeres el próximo 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, con el objetico de evidenciar la brecha salarial de género, reconocer el trabajo doméstico no remunerado y protestar por el incremento de la violencia y el feminicidio en todos los países.
Las acciones van cobrando fuerza a lo largo del mundo y ya se hacen visibles en las redes sociales que han contribuido a la organización de las demandas de los grupos feministas de cada país, quienes se están organizando para participar en las movilizaciones masivas.
Diversos colectivos feministas, organizaciones civiles, sindicatos obreros e instituciones alrededor del mundo planean campañas para convocar al paro de mujeres bajo el lema: “Si nuestras vidas no valen, produzcan sin nosotras” que invita a todas las mujeres a frenar labores con el propósito de evidenciar la desigualdad.
Según información del portal #2018M, de La Internacional Feminista, quien trabaja en la coalición y organización de movimientos, redes y colectivos para fortalecer y emprender acciones de la lucha feminista, países como Argentina, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, El Salvador, Francia, Guatemala, Honduras, España, Estados Unidos, Venezuela y México se han sumado a la convocatoria.
Se espera que en el paro participen más de 51 países donde ya se celebran asambleas con la finalidad de reforzar el movimiento y planear estrategias de movilización.
A un mes del 8 de marzo se mantiene la expectativa, en particular ante las campañas contra el acoso sexual y la violencia feminicida como el movimiento #Metoo (#YoTambién, en español) que surgió después de que en octubre del año pasado se dieran a conocer casos de acoso sexual contra las actrices de Hollywood.
Aunado a estos casos que salen a la luz hay grupos feministas que señalan las deficiencias de las políticas públicas diseñadas para erradicar la violencia de género alrededor del mundo y las diversas opiniones respecto a las acciones feministas en contra de las violaciones a los derechos de las mujeres y la inseguridad.
El llamado al paro, según las organizadoras, se hace con la intención de visibilizar la importancia de la mujer en todos los ámbitos. Por ejemplo, en el trabajo que realizan dentro y fuera del hogar, que normalmente no es reconocido o es impuesto como un rol de género y las consecuencias que estas asignaciones tienen en sus vidas.
Como parte de las acciones planeadas, las mujeres están invitando a otras a realizar compras de primera necesidad en comercios locales emprendidos por mujeres y boicotear a las empresas que cosifican el cuerpo femenino al recurrir al sexismo y misoginia para hacer rentables sus productos.
Así como el 8 de marzo de 2017 marcó una huella en la historia de la organización y la unidad de las mujeres porque no incluyó a mujeres de varias nacionalidades y provocó la generación de redes y asambleas a nivel mundial, ahora también se espera que resurja el grito frente a la violencia cotidiana. Es por ello, que este 2018 se prevén acciones similares y multitudinarias para lograr respuestas efectivas a las demandas en cada país.
18/SRC
DERECHOS HUMANOS
DESDE LA LUNA DE VALENCIA
¡Apropiémonos!

Acabamos de conmemorar (que no celebrar) el 8 de marzo, Día Internacional de las Mujeres y por primera vez (al menos que yo sepa) se convocó un Paro Internacional de Mujeres. Dicho paro de media hora, entre las 12:00 y las 12:30, afectaba a los espacios laboral, de cuidados y de consumo para protestar contra la desigualdad salarial, las violencias machistas y cualquier elemento de discriminación contra la mujer.
Esta convocatoria tuvo su origen en la multitudinaria marcha celebrada el pasado 18 de octubre en Argentina, donde millones de mujeres decidieron salir a las calles para decir basta a la violencia machista tras el brutal asesinato de Lucía, una joven de 16 años a quien drogaron, violaron y empalaron hasta que murió.
Desde hace unos años, las convocatorias feministas multitudinarias como "El tren de la Libertad", el 7N o este mismo Paro Internacional del 8M tienen como denominador común su rápida expansión y el importante papel que para ello juegan las redes sociales y, por tanto, Internet. Con esto no quiero decir que sin internet no habría movilizaciones feministas o de cualquier tipo. No, no estoy queriendo decir eso.
El movimiento feminista tiene entre sus virtudes la de adaptarse a los tiempos y evolucionar, precisamente porque ha de estar alerta a las nuevas formas que utiliza el patriarcado para provocar e intentar imponer sus leyes. Por este motivo el feminismo en red llega a ser tan potente, porque en un solo "clic" puede estar llegando a muchísimas personas de todo el mundo.
Cuando vives en un espacio alejado de las grandes ciudades que es donde se producen los encuentros, los debates, los intercambios de pensamientos con el enriquecimiento que eso conlleva al interrelacionarte con otro tipo de pensamientos y de formas de ver el mundo, internet y las redes sociales juegan un papel esencial para el acercamiento de esos intercambios y, por tanto, para el enriquecimiento personal.
Hace años que opino que internet ha venido para democratizar los medios de comunicación, puesto que cada cual puede opinar sobre lo que ocurre cada día con un blog, por ejemplo. Y ahora mucho más con las potentes redes sociales como Facebook o Twitter que, además son inmediatas.
Y creo que al feminismo estas herramientas nos han venido muy bien para podernos relacionar e incluso conocer mujeres de todo el mundo. Mujeres lejanas y cercanas que, seguramente de otro modo no nos hubiésemos llegado a conocer. Y cuando después de un tiempo de interacción por redes llegamos a encontrarnos cara a cara, el trabajo previo está hecho y llega el momento que, en su día, mi admirada Mar Esquembre Cerdá llamó como "dervirtualizar afectos" o al menos a mí me lo dio a conocer ella.
Cuando nos apropiamos de estas herramientas que internet nos ofrece, nuestro campo de acción de multiplica y nuestra voz se expande, por tanto, nuestro propio poder personal crece y se multiplica, lo que nos ayuda con nuestro propio empoderamiento personal y colectivo.
Por ello, al menos para mí, es importante hacer ese acto consciente de apropiación de las redes, porque quiero seguir aprendiendo y aportando. Quiero recibir información variada e incluso contrainformación de lo que ocurre cada día. Y por supuesto decir lo que pienso cada vez que lo necesite o lo decida.
Las redes sociales no son una panacea y lo sé. Sé que están vigiladas y que son grandes multinacionales quienes las controlan. Pero, insisto en que, con un uso adecuado, al feminismo le han dado alas y la posibilidad de llegar más allá e incorporar a mucha gente joven como ya vamos viendo en las manifestaciones y movilizaciones de estos últimos años.
Y creo que el hecho de que las movilizaciones de este pasado 8 de marzo tanto a nivel europeo como a nivel de americano hayan tenido un éxito como el que hemos comprobado con un lema común como lo ha sido "Ni una Menos" tiene que ver, también con esto y, por supuesto, con el tesón de muchas mujeres y cada vez más hombres por denunciar desde todos los foros posibles al patriarcado asesino.
Sabemos que el patriarcado se camufla de muchas maneras para mantener su orden asesino, pero también creo que, desde el feminismo solidario, aunque sea en redes, somos capaces de llegar más lejos con nuestros discursos.
Tomar las calles para visibilizarnos es absolutamente necesario. Lanzar gritando nuestras exigencias es irrenunciable. Hablar en todos los foros donde seamos llamadas y en donde nos dejen ante la gente que venga a escucharnos es imprescindible. Llevar nuestro mensaje feminista en nuestro día a día por coherencia personal y social es algo que ya forma parte incluso de nuestra propia piel. Pero para organizar esa toma de calles, armonizar y aunar nuestros mensajes tanto en las calles como en los foros e incluso para ir sumando nuevas voces, creo que internet y las redes sociales son buenas aliadas para el feminismo.
Por eso propongo que nos las vayamos apropiando todavía más, para teñirlas de violeta y ponerlas a nuestro servicio, para poder compartir saberes y conocimientos, para desde ellas seguir sumando esfuerzos para acercarnos a nuestro objetivo final: combatir al feroz patriarcado que nos asesina.
Porque, aun sin ser la panacea, son una herramienta más que nos permite comunicarnos y conocernos.
Porque no se trata solo de hacer ciberactivismos feministas, sino de utilizar ese espacio ciber para aumentar y expandir el activismo feminista y contrastar sus diferentes corrientes y opiniones.
Pero sobre todo para ir contactando y conociendo a tantas compañeras feministas como las que existen por el mundo e ir “desvirtualizando afectos” aunque a veces nos llevemos alguna decepción.
Si apropiándonos de esas herramientas el feminismo puede llegar a más espacios y empoderar a más mujeres, ¡apropiémonos de ellas!
Y como dice la gran amiga feminista Begoña Piñero, "así lo pienso y así lo digo porque ya no me van a callar".
tmolla@telefonica.net
* Corresponsal, España. Comunicadora de Ontinyent.
17/TMC/GG
DERECHOS HUMANOS
MUJERES CAUTIVAS
8 de marzo: un día de lucha por los Derechos de las Mujeres

La historia más extendida sobre la conmemoración del 8 de marzo hace referencia a los hechos que sucedieron en esa fecha del año 1908, donde murieron calcinadas 146 mujeres trabajadoras de la fábrica textil Cotton de Nueva York en un incendio provocado por las bombas incendiarías que les lanzaron, ante la negativa de abandonar el encierro en el que protestaban por los bajos salarios y las infames condiciones de trabajo que padecían. También se reconoce como antecedente las manifestaciones protagonizadas por obreras textiles el 8 de marzo de 1957, también en Nueva York.
PROTAGONISTAS DEL 8 DE MARZO
Si la máquina del tiempo existiera, podríamos ver a Celia o a Elisa, junto con sus compañeras de fábrica, caminando por las calles de Nueva York a fines del invierno de 1857. Era una época en la que cada vez más mujeres se incorporaban a la producción, especialmente en la rama textil, donde eran mayoría absoluta. Pero las extenuantes jornadas de más de 12 horas a cambio de salarios miserables sublevaron a las obreras de una fábrica textil neoyorquina que salieron a reclamar por sus derechos. Era el 8 de marzo y las manifestantes fueron atacadas por la policía.
Pero no fue la primera ni la última vez que las obreras textiles se movilizaban. Medio siglo más tarde, en marzo de 1908, 15 mil obreras marcharon por la misma ciudad al grito de “¡Pan y rosas!”, sintetizando en esta consigna sus demandas por aumento de salario y por mejores condiciones de vida.
Fue, finalmente, en 1910, durante un Congreso Internacional de Mujeres Socialistas, que la alemana Clara Zetkin propuso que se estableciera el 8 de marzo como el Día Internacional de la Mujer, en homenaje a aquellas que llevaron adelante las primeras acciones de mujeres trabajadoras organizadas contra la explotación capitalista.
INSTITUCIONALIZACIÓN DEL DÍA INTERNACIONAL
Fue el 8 de marzo de 2011 cuando el Fondo de Naciones Unidas para las Mujeres (UNIFEM), propuso a la Asamblea General de la ONU que todos los 8 de marzos se conmemorara el Día Internacional de las Mujeres y fue, a partir de ese año, que en lugar de conmemorar a nuestras ancestras, se convirtió en una celebración sin sentido, vacía de su contenido principal, donde hoy nos dicen felicidades y nos regalan una flor.
8 DE MARZO DE 2017
Y este 8 de marzo será, sin lugar a dudas, una conmemoración diferente, gracias a la iniciativa de convocar al Paro Internacional de Mujeres, que nos declaramos en huelga de trabajo, labores domésticas y de cuidado y de consumo, en por lo menos 40 países del mundo. Bajo la consigna “si nuestro trabajo no vale, produzcan sin nosotras”, tomaremos las calles las plazas, para protestar por la igualdad sustantiva y contra la violencia machista.
Dejaremos de trabajar, de cuidar, de limpiar y de consumir. Es un reconocimiento de que hay un sistema político, económico y sociocultural que nos oprime en todo el mundo y al que aspiramos subvertir. Es un llamado a construir un feminismo inclusivo e interseccional que nos invita a unirnos a la resistencia contra la discriminación, el racismo, la islamofobia, el antisemitismo, la misoginia y la explotación capitalista, porque nos están matando, porque nos desaparecen, porque no queremos ni una más víctima de las redes de trata y prostitución y ni una menos desaparecida o víctima de feminicidio.
Distintos grupos tomaran las calles con sus demandas específicas, nosotras contra la explotación de mujeres y niñas, sobre todo porque la Asamblea Legislativa del Distrito Federal y otros Congresos estatales insisten en reglamentar la prostitución y reconocerla como “trabajo”.
POR QUÉ NOS OPONEMOS
Es acaso porque las abolicionistas somos de derecha y tenemos pactos con Bush, como se ha estado divulgando por Marta Lamas, o que vemos la sexualidad humana desde una postura moral y nos resistimos al progreso. No, no es así, nos oponemos porque como ha sucedido en Holanda, Alemania, el Estado de Victoria, en Australia, o Brasil y Uruguay, la antigua dicotomía entre la mujer virtuosa y la puta se reemplazó por una nueva dicotomía: trabajadora sexual – mujer víctima de trata.
Mientras tanto, con el objeto de defender a la prostitución como un “trabajo”, se articuló la definición de la trata como neutral al género, mediante la trata para explotación laboral y la trata para explotación sexual se integraron bajo el mismo rubro, como “trata de personas”.
De otra manera, hubiera sido muy evidente que el daño profundo de la trata con propósitos sexuales es decididamente una condición de género mediante la cual la víctima de la trata es trasladada o transportada para la prostitución. “La prostitución” fue borrada del léxico y fue reemplazada por “trabajo sexual”. De la misma manera, “proxeneta, lenón o padrote”, “reclutador” y “propietario de burdel” se reemplazaron por “dueños de negocios o empresarios” o “gerentes”.
Sin embargo, el término “trata” resulta un poco complicado, porque significaba que aquellas personas tratadas son víctimas. Entonces, el término “trata” empezó a reemplazarse con uno mucho más neutral, “migración”. Debido a que era peligroso que los agentes que se benefician de la transportación de mujeres fueran estigmatizados como tratantes comunes, por lo que se acuñó la frase de “migración asistida”.
La verdad es que lo que se insiste llamar trata sexual no es nada menos que la prostitución globalizada. Los industriales del sexo transportan niñas y mujeres a través de fronteras nacionales o locales y las “lanzan” a la prostitución en lugares donde sus víctimas son menos capaces de resistir y donde existe la mayor demanda para ellas, siendo, finalmente la demanda la que a través de la prostitución, propicia la trata. En países con mayor grado de avance de las mujeres es donde existen relativamente pocas mujeres disponibles localmente para la explotación sexual comercial. Los burdeles de los Estados Unidos, Canadá, Holanda, Alemania, Austria, Suiza y Australia están llenas con mujeres tratadas de Asia, América Latina y Europa del Este.
El crear distinciones entre prostitución (o “trabajo sexual”) y la trata protege a los negocios de la industria sexual. Aquellas personas que han promovido ese tipo de distinciones han sido en su mayor parte los que tienen intereses económicos relacionados con la industria del sexo. Países entre los que sobresalen Holanda y Alemania, que legalizaron y establecieron impuestos a los negocios de la industria del sexo y financian el cabildeo a favor de la prostitución a través de organizaciones no gubernamentales, grupos libertarios y los intereses de la industria del sexo.
Su filosofía fue originada por una organización cuya sede está en Coyote, California, quienes se abrogan el crédito de haber acuñado el término de “trabajadoras sexuales” en los principios de los años 70. Ahora, Coyote representa solo una mezcla de activismo libertario y empresarios de la industria del sexo, asociados con la Alianza Global contra la Trata de Mujeres (GATW) cuya filosofía es que la prostitución es un trabajo, como cualquier otro y que debería ser legalizado como tal.
Si esta postura avanza en nuestro país, además de que competiríamos con Brasil por el segundo lugar mundial como destino de turismo sexual, personajes como Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre, expresidente del PRI en la Ciudad de México, serían empresarios, en lugar de delincuentes.
**Directora Regional de la Coalición contra el Tráfico de Mujeres y Niñas en América Latina y el Caribe (CATWLAC, por sus siglas en inglés).
Twitter: @CATWLACDIR
Facebook: Catwlac Directora
17/TUZ/GG
VIOLENCIA
Se une PIM
El 8M en Argentina: contra la violencia, por la vida y nuestros derechos

Dentro de una semana, el Paro Internacional de Mujeres (PIM) recorrerá casi 30 países, como informó Cimacnoticias, y uno de los focos será Argentina, cuna del movimiento “#NiUnaMenos”, gestado desde 2015 para repudiar los incesantes casos de feminicidio.
El 8M argentino será el segundo paro de mujeres convocado por fuera de los sindicatos en poco tiempo. Ya el 19 de octubre de 2016, tras conocerse el crimen contra una joven de 16 años en Mar del Plata, del que dio cuenta Cimacnoticias, se realizó en muchas ciudades argentinas una huelga de trabajadoras.
Natalia Gherardi, directora ejecutiva del Equipo Latinoamericano de Justicia y Género (ELA), dijo en diálogo con Cimacnoticias que ya en ese momento la preocupación por la erradicación de las violencias se planteó dando cuenta de un contexto de desigualdad de género. Aquella protesta se extendió por una hora y continuó con una movilización en torno a los lemas #NiUnaMenos #VivasNosQueremos pero, en rigor, contra todas las violencias históricas y poco visibles que preceden y sostienen los femicidios.
Cinco meses después, las argentinas preparan su segunda huelga. A lo largo y a lo ancho de este país, colectivos feministas, movimientos sociales, artísticos y sindicales, centros de estudiantes secundarios y universitarios, así como partidos políticos y organismos de derechos humanos, se están preparando contra reloj para desembocar en un Día de la Mujer diferente: con las mujeres masiva e internacionalmente unidas y en las calles, defendiendo con distintas modalidades de participación su vida y sus derechos.
“Paramos para detener nuestras tareas y también para darnos el tiempo de una toma de conciencia: le decimos basta a la violencia machista y la reconocemos también en las tramas económicas y sociales que nos agobian, nos empobrecen y coartan nuestras decisiones”, sostuvo en un comunicado de prensa el colectivo Ni Una Menos.
Un “ruidazo” al mediodía en el centro porteño será la señal de inicio de la jornada que terminará con una movilización central a las 17, desde el Congreso nacional hasta la Casa de Gobierno, frente a la Plaza de Mayo. La dinámica será replicada en el mismo horario en el resto de las ciudades del país. En la provincia de Buenos Aires, por ejemplo, se prevé un marcado de edificios públicos con banderas color violeta que llevarán el mensaje de las trabajadoras en este día de lucha.
La organización PIM (parodemujeres.com), creada por mujeres de diferentes partes del mundo en 2016, resume que esta huelga “construye puentes para definir, refinar y concentrar una presión más efectiva sobre nuestros gobiernos” y enumera cuáles son las principales urgencias (reclamos al Estado) para cada país que adhiere. En la Argentina, menciona las siguientes:
– Basta de femicidio y travesticidio
– Basta de precarización laboral
– Aborto legal, seguro y gratuito
– Implementación de la Ley de Educación Sexual Integral
– Separación Iglesia-Estado
– No a la trata
– Basta de persecución a migrantes
– Libertad a Milagro Sala y compañeras presas políticas
– Desprocesamiento a todas las luchadoras populares
– Dignidad y fin de tratos inhumanos a las compañeras presas
– Socialización de tareas domésticas y de cuidado
– Jubilación para amas de casa
– A igual trabajo, igual salario
– Financiamiento para los programas de prevención de la violencia contra las mujeres y protección de las víctimas
– Mayores licencias laborales por maternidad y paternidad, y por violencia de género.
OTRAS ACCIONES
Del paro de mujeres de 2016 a esta parte se pueden reseñar dos novedades en la agenda del movimiento contra la violencia de género en la Argentina. Por un lado, se ha publicado el primer Índice de la Violencia Machista. La herramienta, creada por la organización Ni Una Menos y disponible en contalaviolenciamachista.com, contiene el resultado de una encuesta anónima y en línea que busca medir el impacto de la violencia sobre la vida de las mujeres -nutrir de datos el Ni Una Menos, en un país flojo de estadísticas oficiales.
Pero sobre todo, logra avanzar en una vital tipificación de las violencias. Es decir, en instalar como violencia unos 15 tipos de prácticas muchas veces naturalizadas, que configuran la trama cultural de la violencia de género y la antesala del femicidio/feminicidio.
Por otro lado, se realizó recientemente en la Capital Federal y en algunas otras ciudades argentinas una manifestación de mujeres con el torso desnudo para protestar puntualmente contra un gran operativo policial desplegado en la ciudad balnearia de Necochea (provincia de Buenos Aires), porque tres mujeres estaban haciendo “topless” en una playa pública.
El caso terminó con el fallo de un juez que fue favorable a estas mujeres acusadas por “actos obscenos”, y con el “tetazo”, que tuvo repercusión internacional. Durante esa acción callejera se vieron consignas como “Mi cuerpo es mi decisión”, “¿Quién decide lo permitido?” y “La única teta que molesta es la que no vende”, pero también otras, de la amplia trama de denuncia contra la violencia de género, como “Vivas nos queremos”.
En este clima llega la Argentina a su 8M, el último acontecimiento apuntado en la línea de tiempo de “Hitos y conquistas del movimiento hacia la igualdad” en la Argentina que elaboró la organización Economía Femini(s)ta.
LA CONTRACARA
En tanto, distintas organizaciones denunciaron judicialmente la reducción del presupuesto asignado al Consejo Nacional de las Mujeres de 96.5 millones de pesos a 116.5 millones, y la eliminación de los 47 millones destinados al Plan Nacional de Acción contra la violencia de género. Con esta reducción, cada mujer tiene destinado solo 0.31 centavos de dólar para implementar la ley nacional de Prevención, sanción y erradicación de la violencia contra ellas, durante 2017.
Tras la presentación del reclamo judicial, el gobierno nacional aseguró que se trató de un “error”, sobre el que se daría marcha atrás. Pero una semana antes del 8M, citada por Cimacnoticias, Gherardi asegura que aún no se revirtió la medida. “No tenemos más que declaraciones, y todavía no se publicó nada al respecto en el Boletín Oficial”, detalló.
En la presentación judicial, las organizaciones le exigen al gobierno encabezado por Mauricio Macri que restituya esos fondos, atento que “resulta inaceptable que en el contexto actual, en el cual desde todos los sectores sociales y políticos se reconoce la grave problemática de la violencia contra las mujeres y se clama por políticas estructurales que reviertan el problema, el Poder Ejecutivo decida vulnerar la voluntad expresada por el Poder Legislativo al asignar recursos presupuestarios destinados a estas políticas”.
17/JLMK/MB/GG
DERECHOS HUMANOS
Paro Internacional de Mujeres
8M: contra la violencia y desde la colectividad

Defensoras de derechos humanos, académicas, organizaciones de la sociedad civil y feministas integrantes de la organización latinoamericana Ni Una Menos convocaron a las mexicanas para que durante el Día Internacional de la Mujer, el 8 de marzo, se manifiesten en contra de los distintos tipos de violencia a los que se enfrentan diariamente.
Como parte del movimiento Paro Internacional de Mujeres (PIM), creado en octubre de 2016 para responder a los tipos de violencia que experimentan las mujeres, en México se espera que se manifiesten en contra de los casos de feminicidio, por la garantía de la seguridad de las defensoras de derechos humanos y el derecho a decidir libremente el ejercicio de la sexualidad, exigencia que integra el derecho al aborto legal, gratuito y seguro, comentó la directora de Consorcio para el Diálogo Parlamentario y la Equidad, Daptnhe Cuevas.
Daptnhe Cuevas dijo para entrevista con Cimacnoticias que al movimiento, también conocido como Paro 8M, se convoca para realizarse en todo el país porque las mujeres “estamos convencidas de que las leyes y políticas públicas que defienden nuestros derechos no han sido suficientes, porque lo que se necesita es un cambio cultural”.
La Integrante de la Red Nacional de Defensoras de Derechos Humanos en México, Atziri Ávila, describió en una entrevista con Cimacnoticias al Paro 8M, como “un llamado a que las mujeres en todo el país manifiesten en los distintos espacios en los que están presentes su rechazo a todos los tipos de violencia que viven”.
Para eso, dijo, de no poder reunirse en lugares públicos, hay otras acciones con las que pueden sumarse, por ejemplo frenar actividades laborales durante 30 minutos, difundir los distintos actos públicos que se realicen en el país durante ese día y manifestarse a través de sus redes sociales.
Académicas y defensoras de derechos humanos estarán en constante comunicación para compartir carteles, audiovisuales y los distintos materiales que surjan de las organizaciones ese día, porque se busca que “resuene en todos lados las exigencias que estamos haciendo”, comentó Daptnhe Cuevas.
La defensora de los derechos de las mujeres Daptnhe Cuevas recalcó la importancia de resaltar lo esencial que es la unión de las mujeres para exigir el
respeto de sus derechos. “Si un movimiento ha demostrado que la unión es importante para incidir en la creación de políticas públicas y la exigencia en el respeto de los derechos humanos, es el movimiento feminista. Sabemos que la fuerza está en el colectivo, así denunciaremos a través de acciones coordinadas”, dijo.
En la Ciudad de México, organizaciones como el Sindicato de Trabajadores de la Universidad Nacional Autónoma de México (STUNAM), el Centro de Apoyo y Capacitación para Empleadas del Hogar (CACEH) y Consorcio para el Diálogo Parlamentario y la Equidad, así como otras 17 organizaciones dedicadas a la defensa de los derechos de las mujeres convocan a sumarse al mitin en el Ángel de la Independencia a las 14:00 horas para realizar una valla humana.
A la par, las defensoras de todo el país que forman parte de la red Ni Una Menos organizarán talleres, conferencias y actos públicos, en donde exigirán el respeto a los derechos humanos de las mujeres.
Bajo la exigencia “Si nuestras vidas no valen, ¡produzcan sin nosotras!”, el PIM ha convocado en 23 países a que las mujeres frenen sus actividades laborales.
Los países que sumarán son: Argentina, Alemania, Australia, Brasil, Chile, Corea del Sur, Costa Rica, Ecuador, Escocia, España, Honduras, Irlanda, Irlanda del Norte, Israel, Italia, México, Nicaragua, Perú, Polonia, Rusia, Salvador, Suecia, Turquía y Uruguay.
17/MMAE/GG
FEMINISMO
El 8 de marzo
Paro Internacional de Mujeres recorrerá al menos 23 países

El Paro Internacional de Mujeres (PIM) es un movimiento de base formado por mujeres de diferentes partes del mundo. Fue creado en las últimas semanas de octubre de 2016 como respuesta a la actual violencia social, legal, política, moral y verbal experimentada por las mujeres actuales en diversas latitudes. Colectivos como “Ni una menos” en Latinoamérica o la “Women’s march” estadounidense lideran una nueva era en la protesta feminista. “Si nuestras vidas no valen, ¡produzcan sin nosotras!”, afirman.
Este paro se ha convocado ya en 23 países: Argentina, Alemania, Australia, Brasil, Chile, Corea del Sur, Costa Rica, Ecuador, Escocia, España, Honduras, Irlanda, Irlanda del Norte, Israel, Italia, México, Nicaragua, Perú, Polonia, Rusia, Salvador, Suecia, Turquía y Uruguay.
Es una acción contra la violencia física, económica, verbal y/o moral contra las mujeres, y exige a los gobiernos que dejen de usar insultos misóginos y empiecen a tomar medidas reales para nuestra seguridad, el acceso gratuito a la atención médica (incluyendo los derechos reproductivos), el establecimiento y aplicación de graves sanciones en casos de violación, violencia en el hogar y de todo tipo de crimen de género y por la secularización de nuestros Estados en todo el mundo, para defender nuestros derechos humanos. Somos más de la mitad de la población y de nuestra decisión depende la continuidad de la vida en la Tierra.
En España, según el Instituto Nacional de Estadística (EPA), en el cuarto trimestre de 2016, 8.4 millones de mujeres tienen empleo; 2.1 millones está en paro, y a otras 9.2 millones de mujeres de 16 y más años son llamadas “inactivas”, pese a realizar más de dos tercios de los 144 millones de horas diarias de trabajo no pagado de alimentación, higiene y cuidado de los demás, en particular de la infancia y las personas en situación de dependencia (a razón de 10 horas diarias por cuidadora familiar, sin domingos ni vacaciones).
“Aunque este año aún no haremos propiamente una huelga en las empresas, en las aulas y en los hogares, empezaremos el 8 de marzo juntas en la calle encendiendo ese poder que está en nuestras manos, porque sin o contra nosotras no se mueve el mundo”.
En España, el Consejo de las Mujeres del Municipio de Madrid, la organización de mujeres cineastas CIMA o la Plataforma del 7N se han sumado a este Paro Internacional de Mujeres el 8 de marzo “para decir no al creciente machismo, convocando una concentración con velas a las 0 horas de dicho Día Internacional de las Mujeres, en las plazas de al menos cinco ciudades del Estado, de forma unitaria con las plataformas unitarias locales”.
Desde las organizadoras, sugieren una forma abierta de protesta, dando varias opciones:
– Paro total: en el trabajo o en las tareas domésticas y en los roles sociales como cuidadoras durante la jornada completa.
– Paro de tiempo parcial: parando la producción/trabajo por 1 ó 2 horas
– En caso de que no puedas parar tu trabajo: usar elementos de negro como ropa negra, cintas negras o cualquier elemento que decidas
– Boicotear las empresas que usan el sexismo en sus propagandas o en su enfoque hacia las trabajadoras
– Boicotear a misóginos locales (a ser elegidos por ti)
– Huelga de sexo
– Corrida bancaria: Retirar dinero de los bancos por un día
– Bloqueo de caminos y calles
– Demostraciones, piquetes, marchas.
17/RED/GG
