Ansiedad, pérdidas y desempleo enfrentan las migrantes retornadas
Migración
Seminario Género y Migración
Ansiedad, pérdidas y desempleo enfrentan las migrantes retornadas
En su retorno de Estados Unidos (EU) a México, las mujeres migrantes quedan en la indefensión; regresan a comunidades marcadas por el desempleo, la inseguridad y falta de oportunidades para su desarrollo personal, sin que existan programas públicos que las ayuden a reinsertarse en su nueva vida, aseguró la investigadora del Instituto para las Mujeres en la Migración AC (Imumi), Alethia Fernández de la Reguera.
Durante el Seminario “Género y Migración: retos y perspectivas en la era de Trump” organizado por el Centro de Investigaciones Interdisciplinarias en Ciencias y Humanidades (CEIICH) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Alethia Fernández señaló que a nivel nacional sólo la Ciudad de México cuenta con un programa de reinserción laboral para la población migrante que fue deportada o regresó por voluntad propia.
Esta consiste, dijo, en apoyos económicos para iniciar un negocio o buscar empleo, pero el resto de la población migrante tiene que buscar por su cuenta la manera de adaptarse a su nueva situación.
La investigadora del Imumi destacó la necesidad de extender en todo el país políticas públicas capaces a atender y reinsertar en sus comunidades a la población migrante y en específico a las mujeres, quienes enfrentan escenarios más adversos: “Me parecen que deben ser políticas que deben generalizarse a nivel nacional, pensar qué hacer con esas mujeres, porque regresan en condiciones de mucha precariedad económica, ansiedad y separación familiar.”
El choque que enfrentan las mujeres que regresan a México es fuerte y complejo, agregó la especialista en migración: pasar de un orden social a otro les implica “integrar a su mundo nuevas formas de socialización, prácticas de la vida cotidiana y asumir nuevos roles en las comunidades”, temas que, a su parecer, también deberían de ser tratados por las autoridades.
APROVECHAR SU CAPACIDAD
Entre estos esfuerzos, de acuerdo con Alethia Fernández, sería fundamental que el gobierno lograra aprovechar las habilidades y capacidades laborales que adquirieron las mujeres migrantes en su estancia en EU, pero la realidad que enfrentan en su regreso es otra, la falta de fuentes formales de empleo abunda en todo el país, “El retorno conlleva muchas pérdidas y va erosionado las ganancias que se obtienen de la migración”, advirtió la especialista.
A partir de los estudios que ha realizado Imumi, Fernández de la Reguera indicó que las mujeres no sólo regresan porque son deportadas, muchas veces asuntos familiares, como el cuidado de personas mayores y de sus hijos e hijas, las obliga a abandonar las oportunidades que lograron construir en el país vecino para poder atender a su familia y con ello su carga es doble: tareas de cuidado y búsqueda de empleo donde no hay oportunidades.
El desempleo es sólo una parte del problema, dijo Fernández, porque a ello se agrega la preocupación de los casos de mujeres que tuvieron que dejar a sus hijos e hijas en el país vecino.
ASESORÍAS
La representante de la Clínica Jurídica de Imumi, Jilian Wagman, dijo que, si bien algunos consulados establecidos en EU han dado buena asesoría a las mujeres deportadas con hijos e hijas, aún detectan problemas para arreglar su documentación y custodia.
Jilian Wagman comentó que es necesario que las mujeres estén preparadas e informadas para saber a qué instituciones acudir en caso de ser deportadas y que sus hijos e hijas sean llevados ante el Sistema de Bienestar Infantil de Estados Unidos. Enfatizó que la ayuda del DIF y los consulados es fundamental para que las mujeres no pierdan contacto con sus familiares.
17/HZM/GG