Fallan programas en México y EU para regularizar a migrantes
Migración
No se apegan a la realidad de esta población
Fallan programas en México y EU para regularizar a migrantes
El Grupo de Trabajo sobre Política Migratoria (GTPM) mostró en un análisis comparativo, que los programas de los gobiernos de México y Estados Unidos para regular la situación de las personas migrantes y disminuir la deportaciones son limitados, y no se apegan a la realidad de la población migrante en cada país.
El GTPM comparó el Programa de Regularización Temporal para Migrantes (PRTM) –publicado el pasado 12 de enero en el Diario Oficial de la Federación– con el Programa de Acción Diferida para Padres (DAPA, por sus siglas en inglés), que anunció el presidente de EU, Barack Obama, el pasado 14 de noviembre.
Según el análisis, si bien ambos programas buscan disminuir las deportaciones de personas migrantes para detener la separación familiar, sus costos y condiciones no se apegan a la realidad y necesidades de la población migrante en cada país.
Las organizaciones civiles que conforman el GTPM informaron que el costo total por persona del PRTM será de 9 mil 38 pesos (sin sumar el costo del permiso para trabajar, superior a mil pesos), y el del DAPA es de 465 dólares (6 mil 584 pesos mexicanos).
Sin embargo, el salario mínimo (SM) en México es de 70 pesos al día, mientras que el de EU es de mil 120 pesos por jornada laboral.
El análisis señala que en el caso de México es posible condonar el pago de este trámite, pero es preciso comprobar que quien lo solicite gane menos de un SM, con lo que quedan fuera las trabajadoras informales, amas de casa, menores de edad y personas jubiladas; mientras que en EU no hay forma de evadir estos costos.
El programa mexicano busca solucionar la “irregularidad” de las personas migrantes de manera permanente, ya que después de cuatro años por ley se podrá acceder a la residencia permanente, pero es un programa al que podrán acceder sólo 30 mil personas.
En contraste, el DAPA es un “alivio temporal” a las deportaciones y existe incertidumbre de que siga después de tres años, ya que otro presidente de EU podría derogar o modificar esta acción ejecutiva.
No obstante, de entrar en vigor el próximo 20 de febrero beneficiaría a cinco millones de personas migrantes en el país vecino.
Respecto al tiempo de residencia para ser elegible para ambos programas, en México es necesario acreditar con testigos dos años de residencia, mientras que en EU deben comprobarse cinco años continuos viviendo en el país.
El DAPA establece que es necesario tener hijas o hijos ciudadanos de EU o familiares residentes legales permanentemente, para beneficiarse del programa; en contraste, el programa mexicano no establece esta condición y, por el contrario, permite la posibilidad de solicitar el ingreso del cónyuge, hijas e hijos menores de 18 años y padres.
En un comunicado, el GTPM explicó que el PRTM es poco
accesible para personas migrantes irregulares, y no se apega a la realidad y necesidades de la población migrante irregular en nuestro país, principalmente por sus altos costos y la no autorización para trabajar.
Aunque el programa –vigente desde el pasado 13 de enero y hasta el próximo 18 de diciembre– se enmarca en la meta “México con Responsabilidad Global”, del Plan Nacional de Desarrollo 2013-2018, y los objetivos 3 y 4 del Programa Especial de Migración 2014-2018, no resuelve las deficiencias de la Ley de Migración en materia de regularización migratoria acorde a las necesidades de la población migrante irregular en nuestro país.
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