Reportan mayor migración femenina interna en Cuba

Error message

Deprecated function: Array and string offset access syntax with curly braces is deprecated in include_once() (line 20 of /home/members/cimac/sites/cimacnoticias.com.mx/web/includes/file.phar.inc).
INTERNACIONAL
Migración
   Viajan a las ciudades; mientras, población rural envejece
Reportan mayor migración femenina interna en Cuba
Imagen retomada de IPS
Por: Helen Hernández Hormilla
Cimacnoticias/SEMLac | La Habana.- 08/07/2014

Las cubanas fueron menos activas en la migración interna durante 2013, aunque se mantienen como mayoría en la población urbana en la isla caribeña, según datos de la Oficina Nacional de Estadísticas e Información (ONEI) publicados la pasada semana.
 
De las 63 mil 996 personas que en Cuba se movieron de sus provincias de origen el pasado año, el 49.9 por ciento eran mujeres, revelan cifras del Anuario Estadístico de 2013.
 
El dato reporta 6 mil 968 migrantes internas menos que en 2012, cuando el intercambio interprovincial ascendió a más de 68 mil personas, de las cuales casi el 57 por ciento fueron mujeres, según el Anuario Demográfico de ese año.
 
La mayoría de las 31 mil 922 mujeres que cambiaron de provincia en 2013 llegaron a la capital, ciudad receptora del 27.4 por ciento de la migración femenina interna, a la que siguen las provincias occidentales de Matanzas (8.5 por ciento) y Artemisa (7.3 por ciento), y la centroriental Camagüey (7 por ciento).
 
En cuanto a la procedencia, el Anuario Estadístico ubica a la zona oriental como principal emisora de emigración interna, casi todas con mayoría femenina.
 
Holguín fue la principal, con 7 mil 300 personas que en 2013 cambiaron de residencia provincial; de ellas, más de la mitad son mujeres. También en las orientales provincias de Granma, Camagüey y Santiago de Cuba fue femenina el 51 por ciento de la migración interna.
 
Según explicó a SEMlac Antonio Aja, director del Centro de Estudios Demográficos de la Universidad de La Habana (Cedem), la tendencia migratoria interna se mantiene de lo rural a lo urbano, de lo urbano a las cabeceras provinciales, y de zonas de menor desarrollo a mayor desarrollo.
 
“En ocasiones las personas siguen los planes de desarrollo gubernamentales y, otras, la lógica de las necesidades y aspiraciones de la población migrante”, refirió el experto.
 
Casi siempre, el movimiento marcha del oriente al centro y de ahí al occidente, con particular énfasis en la capital del país.
 
Las zonas urbanas reportan mayor población femenina, pues son ellas el 51 por ciento de los más de ocho millones de habitantes de ciudades y pueblos en la isla caribeña, con una población de 11.2 millones.
 
El desarrollo desigual entre la ciudad y el campo en Cuba se valora por algunos especialistas como razón para que ellas sean el 46 por ciento de los más de dos millones 596 mil habitantes rurales en el país.
 
Aja explicó que los comportamientos históricos y la impronta de determinados planes gubernamentales de desarrollo motivan a las personas a emprender camino fuera, una lógica común en otras partes del mundo, fundamentalmente América Latina y el Caribe.
 
Además, cita como causas las disfuncionalidades económico-sociales del país y las percepciones y representaciones de la población cubana, cuyas carencias, soluciones y expectativas desempeñan un rol principal.
 
Estas lógicas hacen que muchas cubanas emigren hacia zonas urbanas, si bien su comportamiento no se manifiesta con igual prominencia en todas las regiones, advirtió el experto.
 
La población de las 15 provincias cubanas y el municipio especial Isla de la Juventud es más o menos equilibrada entre mujeres y hombres, con ligera preponderancia masculina.
 
Sin embargo, las ciudades con más desarrollo económico y grado de urbanización tienden a estar algo feminizadas. En La Habana, por ejemplo, la proporción resulta significativa, pues ellas componen el 52.1 por ciento de una población de dos millones 117 mil habitantes.
 
Para el investigador, estos procesos traen como consecuencia el despoblamiento de las zonas rurales y su envejecimiento, la disminución sensible de la población económicamente activa en el campo y la aglomeración en ciudades, en particular la capital.
 
Un artículo de la demógrafa Blanca Morejón de 2007, publicado por la revista Novedades de la Población del Cedem, advertía que la movilidad interna en Cuba se inclina al aumento de la escolaridad, con mayor participación de dirigentes, profesionales y técnicos.
 
Esa propensión favorece a las mujeres, que en 2013 eran 65.2 por ciento de personas graduadas con nivel superior en el país y el 66.8 por ciento de profesionales y técnicos en activo, según la ONEI.
 
Incrementar proyectos de desarrollo local, sobre todo en espacios rurales, es una de las estrategias favorables para contener el flujo migratorio hacia las ciudades en Cuba, defienden especialistas.
 
La socióloga Kenia Lorenzo subrayó a SEMlac la urgencia de favorecer nuevas formas de empleo femenino en el campo, pues “muchas mujeres se han ido porque no encuentran oportunidades para trabajar”.
 
“Debe tenerse claro que las mujeres son protagonistas del desarrollo y que precisan un verdadero empoderamiento en estos espacios, no una participación asistencialista”, acentuó la investigadora del Centro de Estudios Psicológicos y Sociológicos.
 
14/HHH/RMB