Feministas hemos apoyado el cambio social y no el sexual

Ante la derechización de los gobiernos que atentan contra los derechos humanos de las mujeres y la corrupción de los partidos de izquierda, el movimiento feminista centroamericano y caribeño debe construir, desde la autonomía, estrategias políticas que transformen las condiciones de desigualdad y subordinación de las mujeres para lograr procesos paritarios.


Tras un recorrido histórico por lo que ha sido la lucha de las mujeres por el reconocimiento de sus derechos humanos, civiles y políticos, líderes feministas de 16 países de la región centroamericana, caribeña y mexicana reconocieron los avances que han logrado a lo largo de la historia e identificaron los retos en el contexto actual.


Si bien se la logrado una representación formal de las mujeres en los procesos políticos de las naciones de la región, continúan siendo vistas en el área pública como usurpadoras, coincidieron las representantes de México, Guatemala, Belice, El Salvador, Honduras, Nicaragua, Costa Rica, República Dominicana, Antigua, Haití, Santa Lucía, Bahamas, Guyana y Barbados.


La participación política de las mujeres y el sistema electoral de cuotas no han sido efectivos para garantizar una participación real de las mujeres, ante las zancadillas y obstáculos que enfrentan dentro de los partidos políticos y las organizaciones civiles mixtas.


Estas dificultades se ven reflejadas en la magra representación dentro de los espacios legislativos. Sólo en 15 países del mundo la representación femenina dentro de las instancias de los gobiernos nacionales alcanza 30 por ciento, cuando ellas son la mitad de la población mundial, señaló la consejera global de género de la organización internacional Oxfam, Anna Coates, organización auspiciante del "Encuentro regional de Reflexión: mujeres y participación política, ejerciendo derechos... desafiando el poder", que inició ayer en Tegucigalpa, Honduras, y que concluyemañana viernes.


CUOTAS, PARTIDOS E ¿IZQUIERDA?


La baja confianza, los prejuicios y el escepticismo de los partidos políticos en la participación política de las mujeres son algunos de los obstáculos para lograr condiciones de igualdad para el desarrollo de los liderazgos femeninos en todo el mundo, explicó Coates.


En su intervención, señaló que las leyes de cuotas, que han sido utilizadas por el movimiento feminista mundial, se pueden reconocer en dos tipos: las reservadas dentro de los partidos políticos y las legislativas que implican su reconocimiento a nivel constitucional.


Hoy, explicó Coates, más de 40 países adoptaron este sistema y desde 1975, año en que se realizó la primera conferencia mundial sobre la mujer en México, la representación femenina en las legislaciones nacionales se ha duplicado.


En su momento, la líder nicaragüense Sofía Montenegro, coordinadora política del Movimiento Autónomo de Mujeres, recordó que en los últimos 26 años Centroamérica ha vivido una situación de guerra, luchas revolucionarias y procesos de pacificación, donde las mujeres han participado sin diferenciar la lucha política social general y la demanda propia feminista.


Advirtió que en estas dos décadas el movimiento feminista no se propuso una estrategia política para la transformación, desde la autonomía. Las mujeres hemos apoyado el cambio social y no el cambio sexual, apuntó la ex guerrillera.


Ante la corrupción de los partidos llamados de izquierda, la secularización y las actitudes dictatoriales de los mismos, la líder nicaragüense se pregunta si realmente en América Latina existe una nueva ola de izquierda, en la cual el movimiento feminista pueda creer y sumarse desde la autonomía, con una estrategia política que logre transformar la condición de subordinación de las mujeres.


Por su parte, la ex diputada federal mexicana por el Partido de la Revolución Democrática, Angélica de la Peña, advirtió que en México y en la región centroamericana se vive hoy la presencia de gobiernos subordinados a la política ultraderechista de Bush, lo cual vulnera los avances logrados en materia de derechos humanos de las mujeres.


En relación a la política mexicana, señaló que hoy se vive una crisis social tras un proceso electoral fraudulento del cual emana un gobierno ilegítimo y débil que ha hecho alianzas con los intereses políticos más oscuros de México.


A lo largo del día, en donde además de la ponencias magistrales se trabajo en grupos de trabajo, las líderes feministas advierten la urgencia de construir acciones efectivas que logren construir la paridad en esta región.


07/LL/GG/CV