Fracasó programa para repatriar a personas con órdenes de deportación
El camino es un acuerdo justo con inmigrantes: NYT
Fracasó programa para repatriar a personas con órdenes de deportación
"Solo ocho de 457 mil", tituló el New York Times un editorial en el que critica la Operation Scheduled Departure que puso en marcha la administración Bush para la repatriación voluntaria de inmigrantes con órdenes de deportación.
"Este mes, la administración de Bush puso en marcha una nueva estrategia para resolver el problema de la inmigración indocumentada y, tan rápidamente como lo hizo, se le revirtió. Le llamo Operation Scheduled Departure y era tan simple como la inscripción voluntaria para evitar la deportación y repatriarse en forma voluntaria.
El programa duró sólo tres semanas y las ocho personas que la adoptaron tendrán 90 días para poner sus cosas en orden "encontrar padres adoptivos para sus hijos o hijas ciudadanas, acordar pagos de casa y deudas de carros, prepararse para sus nuevas vidas en su viejo país", dice el NYT.
Según el diario, se trató de un programa de ingenua concepción y peor ejecución. Immigration and Customs Enforcement no imagina lo que piensa y hace la gente indocumentada. Sospechamos, dice el rotativo, que lo que realmente desea la administración es cubrir su continua campaña de redadas y arrestos. Esa es la real estrategia. Es brutal, simple y también inefectivo.
El Programa de reportes para deportación, señala el NYT, casi no captura a nadie y reafirma los puntos que impulsa la Agencia de Migración y sus restricciones: inmigrantes sin documentos constituyen una clase vasta de fugitivos criminales, y solo haciendo cumplir la ley se resolverá el problema.
Uno de cada 20 trabajadoras y trabajadores es indocumentado. Redadas federales hacen la detención de una persona, por docenas o a cientos en una sola acción, lo que dejará a millones en las sombras en las décadas por venir. Las redadas también están dejando a ciudadanas y ciudadanos aterrorizados, dice el NYT.
Una deportación masiva es una misión imposible y significa una receta traumática para la familia y la economía, en una escala colosal, pues más de tres millones de estadounidenses jóvenes, de niñas y niños nativos nacidos aquí viven en casas que son sostenidas por uno o los dos padres que son indocumentados.
Existe un mejor camino, propone el NYT: construir un sistema para trabajadoras y trabajadores inmigrantes y sus familias, un sistema en el que la gente pueda acceder, ir por él, no alrededor.
Es el camino de un arreglo o trato sensato con quienes se esconden, personas indocumentadas que trabajan arduamente, requiriéndoles que se documenten y se asimilen. El poder de las leyes, por su parte, debe ser utilizado para localizar y deportar criminales.
Ese es el camino a seguir, sentencia el NYT, controlar la frontera y hacer de Estados Unidos menos vulnerable, lejos de arreglos rápidos que suenan bien y no resuelven nada.
08/LPB/GG